Cuando abrí este blog me dije que como parte de lo que podríamos llamar mi línea editorial, no hablaría de una serie hasta que no estuviera terminada la temporada ya que las cosas pueden cambiar mucho de un episodio a otro y nunca se sabe como acabará todo, pero viendo anoche el tercer episodio de Sin Identidad en Antena 3 sentí la necesidad de compartir algunos de mis pensamientos sobre la serie española así que aquí traigo este artículo.
Debo reconocer primero que hace tiempo que dejé de ver de manera habitual ficción española. Me cansé de tener que quedarme hasta las tantas para poder ver terminar un episodio (entre lo tarde que empiezan, lo mucho que duran y la publicidad antes de las 0:30 no acaba nada), si a eso le sumamos unas tramas que se centran siempre alrededor de los mismos temas tratando de enganchar a toda la familia comprendiendo desde los hijos hasta los abuelos pues nos quedamos con poca variedad donde elegir. Pero de vez en cuando me gusta darle la oportunidad a las series nuevas que salen y Sin Identidad es una de ellas.
¿Y con qué me encontré? Pues con un empiece sacado punto por punto de El Conde de Montecristo como quien dice: cárcel en el extranjero, amiga que le ha ayudado dentro y le dice donde encontrar fuera dinero y ayuda, luego la amiga muere y haciéndose pasar por la muerta nuestra protagonista consigue escapar de la cárcel. Una vez fuera se hace con una cantidad ingente de dinero y se cambia el nombre a Mercedes Dantés. Cuando ví lo de Dantés me dió la risa, lo reconozco, por si sacar los primeros minutos de la historia del libro de Alejandro Dumas no fuera suficiente le pusieron a su protagonista el mismo apellido que al marsellés protagonista de la novela, Edmond Dantés. Pero bueno, me dije, hoy día es difícil encontrar algo 100% original en una historia de ficción así que le dí un voto de confianza a Sin Identidad y seguí viendo el episodio.
De repente ya no estaba viendo la misma historia. Habíamos retrocedido 12 años, descubrimos que la protagonista en realidad se llama María Fuentes y a sus 27 años acaba de descubrir que es adoptada. Aquí nos encontramos con una trama totalmente distinta sacada de las historias de niños robados que tan tristemente han ocurrido en nuestro país durante años. El ritmo de la serie cambia, se hace más lento, la iluminación es incluso diferente. Espero que el flashback sólo dure unos minutos y que Sin Identidad continúe presentándome la historia de la venganza. No ocurre, el primer episodio termina y no hemos vuelto a ver nada de Mercedes Dantés o María Fuentes en el futuro.
Bueno, sólo ha sido un episodio. Me quedo con una sensación de que no tengo muy claro que he visto, pero a la semana siguiente ahí estoy de nuevo delante del televisor. Y vuelvo a encontrarme con 70 minutos de flashback en los que se sigue desarrollando la trama del robo de María al nacer. Aparece la madre biológica, vemos que el primo de María no es trigo limpio y tenemos que tenerle vigilado, el abogado que la ayuda parece majo y los padres de ella quieren ocultar la adopción como sea. Bueno, la historia no está del todo mal, pero sigue sin ser la historia de venganza que me habían prometido.
Empiezo a mosquearme, ¿qué planteamiento es éste para una serie? Es verdad que nos tienen que contar que ha pasado para que sepamos a cuento de qué viene la venganza, pero lo más fácil habría sido hacer una serie de flashbacks a lo largo de la historia o ir contando poco a poco lo que había pasado. En fin, me planteo que hacer cuando llegue el siguiente martes, pero veo los anuncios y vuelve a salir Mercedes/María hablando de su venganza. Me da esperanzas. Vuelvo a poner Antena 3 y me dispongo a ver el tercer episodio.
Y ahora ya sí que no sé que pensar de Sin Identidad. El tercer episodio comienza en el tiempo real, 2013, con Mercedes/María descubriendo que se la dió por muerta en un accidente y por eso su familia no la buscó durante estos años, de ahí pasamos a flashback en la carcel china de donde se escapó al principio de la serie, nos enteramos que ya lleva ahí 5 años y que no ha tenido ningún contacto con su familia, además de ver lo mal que lo está pasando y como se convierte en una chica dura para poder sobrevivir. Volvemos a 2001 de repente, María sigue investigando como fue su adopción, el abogado sigue ayudándola y su primo sigue siendo chungo. Descubrimos que la familia perfecta a la que pertenece María no lo es tanto y todos tienen algo que ocultar en su pasado. De repente volvemos a 2013, Mercedes/María vuelve a la que era la casa de sus padres que ahora está vacía y se encuentra, así como que muy convenientemente, todo un expediente policial a su nombre en la que era la caja fuerte de su padre. Así se entera de que su familia creyó que ella se había fugado con un traficante de armas de manera voluntaria y trabajaba como prostituta de lujo, su voz en off nos dice que ahora está más resuelta que nunca a vengarse y... ¡volvemos a 2001! Esto ya no sé si son flashbacks, flashforwards o dos series unidas a través del corta y pega de Windows Movie. María descubre todavía más secretos y se acaba el episodio. Por lo que nos cuentan en el avance la cuarta entrega seguirá contando la historia de 2001.
Me quedo en el sofá mirando mi televisión. ¿Qué estoy viendo? ¿Una historia de venganza? ¿Una de niños robados? ¿Las dos a la vez intercaladas sin sentido? Ya no pienso que esté viendo una serie contada en flashback, toda la serie es el flashback. Lo de la venganza no sé cuando se llevará a cabo. Entro en Internet y me entero de que la serie originalmente se iba a llamar Robada. Ahora todo tiene sentido para mí. No sé que pasaría por las cabezas de los productores de ATresMedia, pero yo creo que tenían montada una serie sobre niños robados con toques de intriga familiar que podría no haber estado mal y alguien en algún momento dijo: "¿Y si lo convertimos en una historia de venganza a lo Conde de Montecristo o Revenge?" Y sin tocar el guión original decidieron añadirle los trozos en el futuro con lo de la venganza y santas pascuas, porque si no no me explico la falta de ritmo que tiene la serie, el que llevemos tres episodios contándonos sólo el pasado y que no esté integrado en las escenas del presente.
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| Mercedes busca venganza |
El tráiler y las promos que nos fue presentando Antena 3 llamaron mi atención: una serie de intriga sobre una chica que volvía para vengarse de su familia. Por lo que poco a poco se pudo saber las tramas de adopciones ilegales y robos de niños también jugarían parte en la trama. ¿Podíamos pensar que la chica al enterarse de ser adoptada tal vez querría vengar el hecho de ser robada? Todavía no habia mucho con lo que especular, pero la verdad es que mi curiosidad por ver que habían hecho me hizo sentarme delante del televisor el día que se estrenó Sin Identidad.
¿Y con qué me encontré? Pues con un empiece sacado punto por punto de El Conde de Montecristo como quien dice: cárcel en el extranjero, amiga que le ha ayudado dentro y le dice donde encontrar fuera dinero y ayuda, luego la amiga muere y haciéndose pasar por la muerta nuestra protagonista consigue escapar de la cárcel. Una vez fuera se hace con una cantidad ingente de dinero y se cambia el nombre a Mercedes Dantés. Cuando ví lo de Dantés me dió la risa, lo reconozco, por si sacar los primeros minutos de la historia del libro de Alejandro Dumas no fuera suficiente le pusieron a su protagonista el mismo apellido que al marsellés protagonista de la novela, Edmond Dantés. Pero bueno, me dije, hoy día es difícil encontrar algo 100% original en una historia de ficción así que le dí un voto de confianza a Sin Identidad y seguí viendo el episodio.
De repente ya no estaba viendo la misma historia. Habíamos retrocedido 12 años, descubrimos que la protagonista en realidad se llama María Fuentes y a sus 27 años acaba de descubrir que es adoptada. Aquí nos encontramos con una trama totalmente distinta sacada de las historias de niños robados que tan tristemente han ocurrido en nuestro país durante años. El ritmo de la serie cambia, se hace más lento, la iluminación es incluso diferente. Espero que el flashback sólo dure unos minutos y que Sin Identidad continúe presentándome la historia de la venganza. No ocurre, el primer episodio termina y no hemos vuelto a ver nada de Mercedes Dantés o María Fuentes en el futuro.
Bueno, sólo ha sido un episodio. Me quedo con una sensación de que no tengo muy claro que he visto, pero a la semana siguiente ahí estoy de nuevo delante del televisor. Y vuelvo a encontrarme con 70 minutos de flashback en los que se sigue desarrollando la trama del robo de María al nacer. Aparece la madre biológica, vemos que el primo de María no es trigo limpio y tenemos que tenerle vigilado, el abogado que la ayuda parece majo y los padres de ella quieren ocultar la adopción como sea. Bueno, la historia no está del todo mal, pero sigue sin ser la historia de venganza que me habían prometido.
Empiezo a mosquearme, ¿qué planteamiento es éste para una serie? Es verdad que nos tienen que contar que ha pasado para que sepamos a cuento de qué viene la venganza, pero lo más fácil habría sido hacer una serie de flashbacks a lo largo de la historia o ir contando poco a poco lo que había pasado. En fin, me planteo que hacer cuando llegue el siguiente martes, pero veo los anuncios y vuelve a salir Mercedes/María hablando de su venganza. Me da esperanzas. Vuelvo a poner Antena 3 y me dispongo a ver el tercer episodio.
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| Reparto de la serie a falta de Victoria Abril |
Y ahora ya sí que no sé que pensar de Sin Identidad. El tercer episodio comienza en el tiempo real, 2013, con Mercedes/María descubriendo que se la dió por muerta en un accidente y por eso su familia no la buscó durante estos años, de ahí pasamos a flashback en la carcel china de donde se escapó al principio de la serie, nos enteramos que ya lleva ahí 5 años y que no ha tenido ningún contacto con su familia, además de ver lo mal que lo está pasando y como se convierte en una chica dura para poder sobrevivir. Volvemos a 2001 de repente, María sigue investigando como fue su adopción, el abogado sigue ayudándola y su primo sigue siendo chungo. Descubrimos que la familia perfecta a la que pertenece María no lo es tanto y todos tienen algo que ocultar en su pasado. De repente volvemos a 2013, Mercedes/María vuelve a la que era la casa de sus padres que ahora está vacía y se encuentra, así como que muy convenientemente, todo un expediente policial a su nombre en la que era la caja fuerte de su padre. Así se entera de que su familia creyó que ella se había fugado con un traficante de armas de manera voluntaria y trabajaba como prostituta de lujo, su voz en off nos dice que ahora está más resuelta que nunca a vengarse y... ¡volvemos a 2001! Esto ya no sé si son flashbacks, flashforwards o dos series unidas a través del corta y pega de Windows Movie. María descubre todavía más secretos y se acaba el episodio. Por lo que nos cuentan en el avance la cuarta entrega seguirá contando la historia de 2001.
Me quedo en el sofá mirando mi televisión. ¿Qué estoy viendo? ¿Una historia de venganza? ¿Una de niños robados? ¿Las dos a la vez intercaladas sin sentido? Ya no pienso que esté viendo una serie contada en flashback, toda la serie es el flashback. Lo de la venganza no sé cuando se llevará a cabo. Entro en Internet y me entero de que la serie originalmente se iba a llamar Robada. Ahora todo tiene sentido para mí. No sé que pasaría por las cabezas de los productores de ATresMedia, pero yo creo que tenían montada una serie sobre niños robados con toques de intriga familiar que podría no haber estado mal y alguien en algún momento dijo: "¿Y si lo convertimos en una historia de venganza a lo Conde de Montecristo o Revenge?" Y sin tocar el guión original decidieron añadirle los trozos en el futuro con lo de la venganza y santas pascuas, porque si no no me explico la falta de ritmo que tiene la serie, el que llevemos tres episodios contándonos sólo el pasado y que no esté integrado en las escenas del presente.
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| María con 27 años y con 39 |
Las promociones de la serie siguen diciendo que no es una historia sobre niños robados, pero yo creo que si la hubieran dejado sólo con esa trama estaría funcionando mejor. La verdad es que de audiencia no va del todo mal, pero ha pasado de casi 5 millones de espectadores en su estreno a 3,5 millones ayer. Si sigue así seguirá perdiendo audiencia seguramente.
Debo confesar que aunque Sin Identidad me esté poniendo de los nervios voy a seguir viéndola. Llamarme masoca si queréis, pero a mi me prometieron una serie con venganza y no voy a parar hasta ver la venganza. O eso o hasta que me demuestren 100% que se han perdido y que no hay por donde salvar a esta serie. Agentes de S.H.I.E.L.D. iba muy mal hasta que de repente dió un cambio radical y la serie mejoró a pasos de gigante. Sé que esto no es Marvel ni Estados Unidos, pero como he dicho al principio, hasta que una serie no termina no puedes decir con total seguridad si ha sido mala.
En fin, este artículo me ha servido para soltar tensión ante los problemas que le veo a Sin Identidad, pero el próximo martes volveré a sentarme en el sofá y a ver Antena 3, aunque posiblemente lo haga con un libro en la mano.
Si vosotros también estáis viendo Sin Identidad ¿qué os parece? ¿le seguiríais dando una oportunidad?
ENLACES DE INTERÉS
Página oficial de Sin Identidad
Si vosotros también estáis viendo Sin Identidad ¿qué os parece? ¿le seguiríais dando una oportunidad?
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